El envejecimiento inminente de la población japonesa

 Desde hace décadas, Japón experimenta una cusado envejecimiento de la población debido a una caída en picado de la natalidad en el país, unido a un aumento de la esperanza de vida dado por los avances sanitarios y la mejora general de la calidad de vida en el país.

Este hecho en sí mismo ha ocasionado una escasez de mano de obra en el país y ha implantado la necesidad de que las personas de la tercera edad se vean en la necesidad de trabajar a altas edades. Esto, no solo está causado por el envejecimiento de la población, sino que se une a una considerable disminución en las pensiones por jubilación las cuales, en ocasiones, no son suficientes para cubrir sus gastos básicos, especialmente en ciudades con alto coste de vida.. Por tanto, al tener una esperanza de vida tan sumamente alta, este grupo de la población necesita una mayor fuente de ingreso para su subsistencia, teniendo como el recurso más accesible, continuar ejerciendo su profesión.

No solo es elevado el coste de los bienes, sino que pese a que Japón dispone de un sistema de sanidad pública de gran eficiencia, los servicios que no quedan cubiertos por este como cuidados a domicilio o residencias para la tercera edad, y que por tanto, son de caracter privado, no son accesibles en cuanto a precios.

 Otro dato a tener en consideración es la cultura del trabajo tan representativa existente en Japón, donde socialmente, prevalece el hecho de ser productivo aunque por edad, la persona pueda jubilarse.

Este fenómeno presenta una serie de consecuencias. En cuanto al plano social, las personas de la tercera edad que ejercen un oficio pueden sentirse incluidas en la sociedad pero, como es evidente, el hecho de trabajar puede ocasionar problemas de bienestar. En el ámbito económico, este fenómeno implica inevitablemente un aumento del crecimiento económico del país.

Noticia aportada por: El Mundo